
Así me ha pasado con “el Embarcadero”, la serie de Movistar.
No es que quiera spoilearos la historia pero es que si no cuento algún rasgo
general de la trama, no tendrá ningún sentido esta columna. Quien avisa no es
traidor.
Hombre felizmente casado, muy enamorado de su esposa conoce
mujer y se enamora de ella también locamente. Fácil, muy a la orden del día
seguramente. Lo que a mí me pudo chirriar al principio es el detalle de que el
hombre es feliz y está enamorado de su esposa porque aunque yo ya sé desde hace
mucho tiempo que una cosa no quita la otra, es decir, estar muy enamorado no excluye
el apetito por un coqueteo externo, en
mi ideal de matrimonio, no se deberían necesitar actividades extramatrimoniales
si se está al 100% bien con tu pareja.
Pues bien, él se enamora de Verónica. Y cómo no iba a
enamorarse de ella si hasta yo lo he hecho. Y me he enamorado de ella y de cómo
ella ve y entiende la vida y el amor. Y me he dado cuenta señoras y señores,
cuan absolutamente equivocada estoy en mi concepto de amor y qué mal estoy
amando.
Me explicaré. Si me preguntan cuál es el amor más verdadero
y puro que conozco, el AMOR en mayúsculas, el de no querer nada a cambio, el de
sólo vivir y morir por la felicidad del otro, lo tengo facilísimo y clarísimo:
el amor que siento por mis hijos.
Es un tipo de amor, como ya he dicho, de por ellos muero y
mato, de contra más amor reciban venga de donde venga mejor y de sea lo que sea
que les aporte felicidad ahí estaré yo para intentar ofrecérselo. Es decir,
quiero que les quieran, cuanta más gente mejor. Provenga de donde provenga el
amor lo quiero para ellos, no hay celos, no hay posesividad ni exclusividad.
¿Entonces qué pasa con el amor que siento por mi pareja? En
ese amor existen celos, posesividad y exclusividad; estas tres características
con cierta connotación negativa y muchas otras por el estilo. Me cuesta mucho asimilar,
a pesar que he barajado la idea de pareja abierta, que él pueda sentir
cualquier cosa relacionada con el amor, la atracción o el deseo con una mujer
que no sea yo. ¿Es por tanto este un tipo de amor equivocado? ¿Estoy amando mal?
¿Estoy errando estrepitosamente definiendo este sentimiento como AMOR, siendo
que dista tanto de la definición que yo misma he creado de lo que para mí es el
amor verdadero? Y es que yo entiendo que una cosa es amor y la otra sexo; que
una cosa es tu compañero de vida, con proyectos en común, la persona con la que
quieres envejecer y la que quieres que esté siempre al volver a casa y la otra
es una noche de sentirte diferente, de un punto de locura, de ser sólo tú por
unas horas etc.También entiendo que cada extremo de la cuerda (el extremo del
amor incondicional y el extremo del sexo por disfrute) puede ir aderezado con
amistad, posesividad, complicidad, intimidad, cercanía, cariño, eternidad o
fugacidad y que los sentimientos son muchas mezclas de definiciones y incluso
que el mismo concepto en una persona u otra o en una circunstancia u otra, pueden
despertar emociones muy distintas.
Ralph Waldo Emerson dijo:”La madurez
es la edad en que uno ya no se deja engañar por sí mismo”; pues puedo decir que
a día de hoy y según esta definición, me siento madura porque ya no me creo mis
propias trampas de película romántica de cuento de hadas, para mi propia vida yo
creo en los cuentos pero no en los fantásticos, sino en los cotidianos, en este
tema me gusta más basarme en historias costumbristas, de las de día tras día,
donde hay niños que lloran, lavadoras, broncas en el trabajo y nervios porque
no nos llega el dinero a final de mes. De adolescente me encantaban las
historias de chico conoce a chica y toda la trama hasta decidir quedar juntos,
el primer beso, la primera cita etc. Ahora estas historias me parecen fáciles,
sin complicación alguna; me parece la parte sencilla del argumento y me
identifico más con el otro tipo de cuentos, los de relaciones largas. Esa es
la parte difícil del guión. Y es que siempre he pensado que cuando
buscamos algo fuera de casa, lo que buscamos es la novedad, el sentir la
ebullición de la sangre ante el primer roce, el sentirnos fantásticos porque el
otro sólo ve en nosotros las cosas buenas que le hemos mostrado (porque no ha
habido situaciones para enseñar aun nuestra cara norte y aunque se hubieran
generado esas situaciones seguramente no las mostraríamos al 100% porque
tampoco nos va la vida en ello, o quizás si, tal vez nos mostraríamos con toda
nuestra gélida cara norte porque por el contrario no nos importaría lo que pensaran
de nosotros); Pero en definitiva lo que buscamos es sentirnos especiales. Y ahí
es cuando surge esa bromita de “Sabes que es el indicado cuando se te
olvida todo, hasta tu marido”. ¿Y cómo no se te va a olvidar tu pareja habitual?
Pues, blanco y en botella. Es como cuando te vas de vacaciones a
Menorca, puestas de sol, mojitos, playa, sin horarios… ¿no te olvidas de tu
vida laboral mundana y cotidiana? Pues yo creo que lo mismo debe pasar con un
amante o con un amigo especial. Todo es bonito porque nada es comparable con
unas vacaciones en Menorca y cuando se está en modo amante vives de vacaciones.
Pues eso, que estreno mi madurez no dejándome engañar por esas vacaciones.
Pero es que estoy liándome y no estoy expresando bien lo que
quiero transmitir.
Entiendo la situación de que pueda surgir la ocasión de un
desliz
Entiendo la situación de que pueda surgir la ocasión de un
desliz estando felizmente emparejado
Entiendo pactar un tipo de relación abierta, puedo entender
tener de vez en cuando un desliz, comerse una madalena de chocolate de vez en
cuando y volver a tu desayuno habitual. Entiendo que puede apetecer un kit kat
que te reinicie la vida y las ilusione.
Entiendo sobretodo las ganas de sentirse especial y de no perderse nada que pueda hacerte experimentar sensaciones nuevas o emociones olvidadas. Aquello de la vida son dos días y el porqué tendría yo que perderme este arrebato de embriagadez.
Y entiendo, mal que me sepa, que estamos obviando cualquier atisbo de moralidad, ética y confianza.
Entiendo sobretodo las ganas de sentirse especial y de no perderse nada que pueda hacerte experimentar sensaciones nuevas o emociones olvidadas. Aquello de la vida son dos días y el porqué tendría yo que perderme este arrebato de embriagadez.
Y entiendo, mal que me sepa, que estamos obviando cualquier atisbo de moralidad, ética y confianza.
Lo entiendo todo y no juzgo nada porque ya aprendí hace
tiempo que quien esté libre de pecado que tire la primera piedra y os aseguro que no voy a ser yo.
Y ahí es donde llego siempre al mismo punto, que entiendo tantas cosas que al final no comprendo nada y es que este es un tema en el que, por lo complicado de las relaciones, por la infinidad de percepciones y sentimientos que tiene cada individuo y por la implicación tan intima y personal que conllevan estos asuntos , por más que, desde el punto de vista teórico, me encanta la jugada de una relación abierta, el poliamor o cualquiera de estas nuevas definiciones que promulgan un modo de amar más sincero con nuestra esencia, sospecho que no sabría llevarlo en mi relación al modo práctico, asi que mejor espero a la próxima temporada de "el embarcadero", a ver si los guionistas me sacan de este embrollo mental.
Y ahí es donde llego siempre al mismo punto, que entiendo tantas cosas que al final no comprendo nada y es que este es un tema en el que, por lo complicado de las relaciones, por la infinidad de percepciones y sentimientos que tiene cada individuo y por la implicación tan intima y personal que conllevan estos asuntos , por más que, desde el punto de vista teórico, me encanta la jugada de una relación abierta, el poliamor o cualquiera de estas nuevas definiciones que promulgan un modo de amar más sincero con nuestra esencia, sospecho que no sabría llevarlo en mi relación al modo práctico, asi que mejor espero a la próxima temporada de "el embarcadero", a ver si los guionistas me sacan de este embrollo mental.